Semillas del Verbo 20

Me asombra encontrar en la RAE once definiciones de “Modelos”. En la que enseguida pensamos es tal vez en la penúltima: “Persona que se ocupa de exhibir diseños de moda”. Pero, ¿nos identificamos con ella? Yo desde luego no…. Por otro lado, si la entendemos como “arquetipo o punto de referencia para imitarlo o reproducirlo” eso es algo que hemos vivido desde niños. El niño lo imita todo; crece copiando. Y yo diría que es así hasta la adolescencia. Pero, ¿a quién y qué copiamos?

A mis quince años, mis modelos eran personas que me atraían por su coherencia de vida. Gente que luchaba por sus ideales: Bob Dylan, Joan Báez, Víctor Jara, Raimon… Estos valientes “influencers” marcaron mi generación. Sin embargo, el día a día lo marcaban otros.

Yo entendí lo que era la honradez viendo a mi padre, o el valor del trabajo viendo a mi madre. No eran canciones, ni palabras… eran actos concretos que iban marcando y modelando mi vida. Ellos no se daban ni cuenta, y eso es lo extraordinario. Como dice el psicoterapeuta y jesuita indio Anthony de Melo: “Hay dos tipos de educación: la que te enseña a ganarte la vida, y la que te enseña a vivir”. A pesar de todos los desafíos y toda la vulnerabilidad que podáis experimentar como padres y madres, yo os animo a que podáis ser esos puntos de referencia que enseñan a vivir a sus hijos.

En el artículo anterior, muchos me expresabais vuestra preocupación por la violencia juvenil y la falta de valores. La solución no es fácil, pero yo diría que no está fuera de nosotros. Empieza en lo más cercano que es la familia y continúa en cada uno como parte que somos de la sociedad. Entendiéndola como “escuela de vida”, me uno totalmente al pensamiento de Víctor Hugo: “El que abre la puerta de una escuela, cierra una prisión”.

Nadie puede decir dónde empieza o acaba la influencia que tenemos en los niños y adolescentes. La realidad es que sembramos en terreno desconocido y sólo el futuro nos mostrará los frutos. Antes, ahora y siempre seguimos necesitando modelos. ¿Nos apuntamos a serlo?

Rosario Garrido SEMD

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