Vosotros no habéis conocido a mi padre, pero él era una persona buena y tremendamente honrada. Enseñó a mi hermano,  a mi hermana y a mí tres cosas principalmente: no mentir, respetar a los demás y hacer las cosas lo mejor posible. Todo esto lo “vimos” en él. Cuál fue mi sorpresa cuando al crecer me di cuenta de que los demás no eran como mi padre.

“Guts” es una palabra inglesa que técnicamente significa intestinos, pero también agallas, valor. Mi padre tenía “guts”, era consecuente con lo que creía. Hay muchas cosas en nuestro mundo que no nos gustan: las mentiras en los políticos; el deseo de poder pasando por encima del respeto a las personas; los intereses privados por encima del cuidado de nuestra madre tierra y muchas más… Pero me pregunto: ¿quién tiene “guts” para intentar, a nuestro nivel, cambiarlo?

Ver, después de la muerte de Mahsa Amini ,la valiente protesta de las mujeres iraníes por la vida y la libertad es una gran esperanza,. Lo es también la audacia del joven músico Shervin Hajipour con su canción “Baraye”. Apenas unos días de lanzarla en las redes sociales se ha convertido en el himno catalizador de la rabia y el hartazgo de la sociedad iraní. No es extraño lo hayan  detenido y encarcelado. ¡Realmente, esta gente tiene “guts”! Ver a mujeres afganas luchando por sus derechos y arriesgando sus vidas cada vez que salen a la calle…, innumerables Ong’s invirtiendo todo lo que tienen por un mundo más justo, más humano…. Estos son guts, guts, y más guts.

Pero, qué fácil es acostumbrarse a ver noticias cada vez más horribles y pensar que uno no puede hacer nada. ¡Qué fácil es no tener guts! Por lo menos para mí…. Por eso cada día intento aprender de toda esta gente que tiene guts. Me gusta recordar las palabras de Abraham Lincoln: “Al final lo que cuenta no son los años de tu vida, sino la vida de tus años”. Las grandes cantidades empiezan siempre por el uno. 1+1+1….y el resultado quizás podría ser muchos años repletos de “vida” para todos. ¡Ojalá!

Rosario Garrido

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