Testimonio vocacional 1. 2025

Hola, me llamo Jeannette, soy alemana y desde hace un año vivo en el sur de Italia, en Brindisi.

A mis 20 años tenía ya las ideas bastante claras para mi futuro: crear una familia, tener una casa y trabajar como asistente social.  Durante los estudios me metí en muchas actividades para jóvenes que se proponían en la diócesis. Ahí conocí también a algunas de las misioneras de nuestra Comunidad. Se me abrió un mundo nuevo: descubrí a Dios.

Y Dios desbarató mis planes. Estaba fascinada de un Dios del que nunca nadie me había hablado de esa manera: una persona viva, que tiene que ver con mi vida, con quien podía hablar y, lo que más me sorprendió: me necesitaba. Dios necesitado de mi para hacerse presente en este mundo, para revelar su amor por cada persona.

Y poco a poco entendí que es esto en lo que quería invertir mi vida a tiempo completo: “dar esperanza”. Descubrí que yo no puedo cambiar el mundo ni las situaciones de sufrimiento que están atravesando las personas, pero sí, puedo dar esperanza. Puedo hablarles de Dios que conoce cada lágrima y que está con cada uno de ellos. 

Jeannette SEMD Brindisi (Italia)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Odirley Gracias por compartirnos una historia reinspiradora! Como les ayudaste a otros con el amor de Dios es bella y quiero hacer lo mismo. A dar esperanza porque solo tenemos a Dios y nosotros mismos en esta vida.
Christa Muchas gracias Jeannette por tu testimonio tan bonito, como con los ancianos descubriste lo que Dios y la fe les daba... Me das animos. Quiero hacer esto tambien, conectar las ersonas con Dios Amor!
Marta Chacón Me encantó tu historia! Rica en fe y voluntad para seguir un camino nuevo junto a nuestro Padre Celestial! Estoy segura que esta nueva ruta que Dios te ha guiado, llenará a ti y a todos los que te acompañan, a una vida plena y feliz! Dios te bendiga!! 🙏🙏
Ana Maria Palma GonzálezTestimonio vocacional 1. 2025